La ASCO actualiza sus pautas sobre cómo manejar la ansiedad y la depresión para sobrevivientes de cáncer
La Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO, sigla en inglés) ha actualizado sus pautas sobre cómo sobrellevar la ansiedad y la depresión en adultos que recibieron un diagnóstico de cáncer.
Las pautas se publicaron en línea el 19 de abril de 2023 en la revista Journal of Clinical Oncology. Lee el artículo en inglés “Management of Anxiety and Depression in Adult Survivors of Cancer: ASCO Guidelines Update” (Manejo de la ansiedad y la depresión en adultos sobrevivientes de cáncer: actualización de las pautas de la ASCO).
La ASCO es una organización nacional de oncólogos y otros profesionales especializados en el tratamiento para el cáncer. La ASCO desarrolla pautas que están respaldadas por investigaciones y experiencias muy fiables con el objetivo de ayudar a los médicos a recomendar tratamientos y análisis.
Para desarrollar las pautas, un grupo de expertos revisó 61 estudios publicados entre 2013 y 2021.
“La evidencia actual permite sostener que las intervenciones de tratamiento recomendadas para la depresión y la ansiedad son opciones terapéuticas efectivas. Sin embargo, se reconoce que la disponibilidad de servicios de salud mental, la facilidad de acceso, el tiempo que pasa hasta recibir asistencia y los costos son factores importantes que pueden variar en los diferentes contextos. La elección de una intervención para ofrecer a los pacientes debe basarse en un proceso de toma de decisiones compartido, teniendo en cuenta la disponibilidad, la accesibilidad, la preferencia del paciente, la probabilidad de cumplimiento y el costo”, afirman los expertos.
Recomendaciones en las pautas
Las pautas abordan tres áreas:
principios generales de manejo
opciones de tratamiento y de cuidado para los síntomas de depresión
opciones de tratamiento y de cuidado para los síntomas de ansiedad
Se debe ofrecer información sobre la ansiedad y la depresión a cualquier persona a la que se le haya diagnosticado cáncer, así como a sus cuidadores, familiares o persona de confianza indicada por la persona que recibió el diagnóstico.
También se les deben ofrecer recursos, como información de contacto para recibir evaluación y tratamiento adicionales.
La información sobre ansiedad y depresión debe ser adecuada para la situación cultural y lingüística. La información puede proporcionarse de forma oral, por escrito o en un sitio en línea.
Los médicos deben usar un modelo de intervención escalonado. Esto significa que deben seleccionar el tratamiento para la depresión o la ansiedad que sea más efectivo y consuma menos recursos en función de la gravedad de los síntomas de cada persona.
Otros factores que deben tenerse en cuenta al elegir un enfoque de tratamiento son los antecedentes psiquiátricos, los antecedentes de abuso de sustancias y otras afecciones.
Los tratamientos suministrados por los profesionales de la salud mental deben estar fundamentados por investigaciones. Los tratamientos deben adaptarse a cada contexto lingüístico, cultural y socioambiental.
Al derivar a un paciente para que reciba atención psicológica, los médicos deben hacer todo lo posible por reducir los obstáculos y facilitar el cumplimiento lo más posible. Después de la derivación, los médicos deben verificar el nivel de satisfacción de la persona con la atención psicológica y ayudarle a superar los obstáculos que pudieran surgir.
Si alguien tiene síntomas de depresión y ansiedad a la vez, se debe priorizar el tratamiento de los síntomas de depresión. Como alternativa, los médicos pueden recomendar tratamientos que aborden a la vez los síntomas de depresión y de ansiedad.
Cuando una persona está bajo tratamiento psicológico, los profesionales de la salud mental deben evaluar regularmente la respuesta al tratamiento; por ejemplo, antes de comenzar el tratamiento, cuatro semanas después del inicio, ocho semanas después del inicio y una vez terminado el tratamiento.
Si se recetan medicamentos para tratar la ansiedad o la depresión, el médico a cargo debe evaluar regularmente la respuesta mediante una herramienta estándar, lo cual debe incluir la evaluación del alivio de los síntomas, los efectos secundarios y la satisfacción. Si los síntomas no mejoran o empeoran, el médico a cargo debe reevaluar y revisar el plan de tratamiento.
Si, después de ocho semanas de tratamiento, los síntomas solo mejoran un poco o no mejoran, si la persona no está satisfecha o si hay obstáculos para el tratamiento, el médico a cargo debe ajustar el plan de tratamiento.
Ante un caso de síntomas de depresión moderados a graves, el médico debe proporcionar información cultural y lingüísticamente adecuada a los pacientes y sus cuidadores, familiares o personas de confianza. Este intercambio puede incluir información sobre síntomas comunes, cómo identificar si los síntomas empeoran, y cuándo contactar el equipo médico.
En el caso de las personas con síntomas de depresión moderados, los médicos deben ofrecer tratamiento individual o en grupo con alguna de las siguientes opciones:
terapia cognitiva o terapia cognitivo-conductual (CBT, sigla en inglés)
activación conductual
actividad física y ejercicios estructurados
reducción del estrés basada en la consciencia plena
intervenciones psicosociales, como relajación, resolución de problemas y otras técnicas
En el caso de las personas con síntomas de depresión graves, los médicos deben ofrecer tratamiento individual con alguna de las siguientes opciones:
terapia cognitiva o CBT
activación conductual
reducción del estrés basada en la consciencia plena
terapia interpersonal
Los médicos pueden ofrecer medicamentos para la depresión a las personas que no tienen acceso a las opciones de terapia psicológica o conductual, a quienes prefieran la medicación o a quienes no mejoren con las opciones de terapia psicológica o conductual.
Ante un caso de síntomas de ansiedad moderados a graves, el médico debe proporcionar información cultural y lingüísticamente adecuada a los pacientes y sus cuidadores, familiares o personas de confianza. Este intercambio puede incluir información sobre los síntomas, cómo identificar si los síntomas empeoran y datos de contacto del equipo médico.
En el caso de las personas con síntomas de ansiedad moderados, los médicos deben ofrecer tratamiento individual o en grupo con alguna de las siguientes opciones:
CBT
activación conductual
actividad física y ejercicios estructurados
intervenciones psicosociales, como relajación, resolución de problemas y otras técnicas
En el caso de las personas con síntomas de ansiedad graves, los médicos deben ofrecer tratamiento individual con alguna de las siguientes opciones:
CBT
activación conductual
reducción del estrés basada en la consciencia plena
terapia interpersonal
Los médicos pueden ofrecer medicamentos para la ansiedad a las personas que no tienen acceso a las opciones de terapia psicológica o conductual, a quienes prefieran la medicación o a quienes no mejoren con las opciones de terapia psicológica o conductual.
Qué significa esto para ti
Si sientes depresión o ansiedad después de recibir un diagnóstico de cáncer de mama, no estás sola. La sensación de ansiedad o depresión se puede disparar en distintos momentos si recibes un diagnóstico de cáncer de mama:
después del diagnóstico inicial
durante el tratamiento
durante un tratamiento activo si recibiste un diagnóstico de enfermedad metastásica
después del tratamiento
durante el seguimiento a largo plazo cuando se hacen estudios para detectar cualquier recurrencia
Estas pautas actualizadas pueden ser útiles para que tú y tu médico tomen las mejores decisiones sobre cómo manejar los síntomas de estas dos condiciones y que puedas vivir tu vida de la mejor manera.
Obtén más información sobre cómo cuidar la salud mental tras un diagnóstico de cáncer de mama.
— Se actualizó por última vez el 10 de agosto de 2023, 16:02