Kelly Shanahan: Hola, soy Kelly Shanahan. Esposa, madre, hija, médica y una mujer que vive con cáncer de mama metastásico. Me diagnosticaron cáncer de mama en estadio temprano en 2008. En 2013, el día de mi cumpleaños, me enteré de que la enfermedad había hecho metástasis.
Me condenaron a la muerte, pero también me dieron la oportunidad de vivir. El cáncer de mama metastásico me ha robado muchas cosas. Mi carrera como médica es una de ellas. Era ginecóloga obstetra, pero tengo neuropatía permanente en las manos. ¿Quién quiere a una ginecóloga que no puede sentir el bisturí o a una obstetra a la que se le puede resbalar el bebé?
Me habrá robado la vida, pero, mientras tanto, encontré mi voz, mi pasión y mi razón de ser en la lucha por la causa. Me involucré en organizaciones como MET UP, de la cual soy directora médica, y METAvivor, que reúne mucho dinero para la investigación del cáncer de mama metastásico específicamente. Y, a través de esta afiliación con METAvivor, me enteré del proyecto Serenity Project.
Así que, con mi quimiocerebro, leí la solicitud de inscripción, la completé y lo que retuve fue que era una oportunidad, casi una clase de retiro breve para pacientes con cáncer de mama metastásico, para que viajaran a Johnson City, Tennessee, a sacarse unas fotos, y había algo acerca de agua, y me aceptaron. Cuando pasó eso y Beth Fairchild, la presidenta de METAvivor, me contactó, estaba medio desorientada, no entendía qué era. Y ella me dijo: “Ya sabes, la sesión de fotos debajo del agua, desnuda, con pintura en el cuerpo”. Y le dije: “Bueno”. Porque ¿saben qué? Como me habían diagnosticado enfermedad metastásica, quiero decir, voy a morir, ¿qué es lo peor que puede pasar? ¿Sentir vergüenza? Como suelo decir, ya no me importa un pepino.
Así que fui a Johnson City, Tennessee, donde, con el fotógrafo Keith Dixon y su esposa, Ren Allen, una talentosísima artista de pintura sobre el cuerpo, pude participar en este proyecto tan transformador. Algo especial de lo que me enteré, que me hizo sentir muy empoderada, fue que la primera esposa de Keith murió de cáncer de mama metastásico. Su nombre era Serenity. La madre de Ren murió de cáncer de mama metastásico. Así que, aunque estuviera desnuda frente a un grupo de extraños, había personas que habían atravesado lo mismo, lo que me daba mucho consuelo y generaba una vibra fraternal.
Ren me preguntó si tenía alguna idea de lo que quería pintarme. Lamentablemente, en ese momento tenía treinta libras de sobrepeso, así que le dije que podía intentar con una ballena. Y le di rienda suelta para que hiciera lo que quisiera. Mi talento y mis habilidades residen en la Medicina. No soy artista, ella sí, así que dejé que hiciera lo que quisiera. Y me pintó un patrón abstracto alucinante que creo que estaba basado en el hecho de que, en ese momento, yo tenía un mechón violeta en el pelo. Y me metí al agua con Keith y su cámara submarina, y fue algo tan liberador y tan increíble, poder ser parte de este proyecto que, ojalá, pueda hacerles saber a todos que, aunque tengamos esta enfermedad metastásica y que podamos morirnos a causa de ella, ahora estamos vivos y tenemos mucho para dar.
Y, quizás, si las personas ven esto y ven quiénes somos, se sientan animadas a estudiar a los pacientes metastásicos y, posiblemente, pueda llegar más dinero para la investigación. Y así, habré dejado un legado. Sin mencionar, claro, que mi hija de diecinueve años sentirá vergüenza de aquí hasta la eternidad. Así que, una victoria rotunda.