Ayuno intermitente: ¿Ayuda a adelgazar?
En este episodio, el Dr. Iyengar explicará lo siguiente:
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qué es el ayuno intermitente y cómo se desarrolló
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por qué algunas personas creen que el ayuno intermitente podría ayudar a prevenir el cáncer de mama
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las investigaciones hasta el momento
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los riesgos del ayuno intermitente y lo que deberían tener en cuenta quienes deseen probarlo
El Dr. Neil Iyengar es oncólogo médico en el Centro de Cáncer Memorial Sloan Kettering, y su práctica profesional se especializa en el cáncer de mama. Su investigación se centra en los vínculos entre la salud metabólica y el cáncer, con un foco específico en cómo la dieta, el ejercicio y los medicamentos pueden prevenir casos de cáncer relacionados con la obesidad, como el cáncer de mama, y mejorar los resultados en casos de inflamación del tejido graso.
— Se actualizó por última vez el 17 de enero de 2023, 16:12
Jamie DePolo: Hola. Gracias por escucharnos. El Dr. Neil Iyengar es oncólogo médico en el Centro de Cáncer Memorial Sloan Kettering, y su práctica profesional se especializa en el cáncer de mama. Su investigación se centra en los vínculos entre la salud metabólica y el cáncer, con un foco específico en cómo la dieta, el ejercicio y los medicamentos pueden prevenir casos de cáncer relacionados con la obesidad, como el cáncer de mama, y mejorar los resultados en casos de inflamación del tejido adiposo.
Hoy hablaremos con el Dr. Iyengar sobre el ayuno intermitente y sobre por qué algunas personas creen que podría ayudar a prevenir el cáncer de mama. Bienvenido al podcast, Dr. Iyengar.
Dr. Neil Iyengar: Muchas gracias por invitarme.
Jamie DePolo: Para comenzar, por si alguien no sabe de qué se trata, sé que se habló mucho en las noticias sobre el ayuno intermitente. ¿Pero podría explicarnos qué es y cómo se desarrolló? ¿Cuál es la lógica detrás de esta práctica?
Dr. Neil Iyengar: Sí. Por supuesto. El ayuno intermitente es una técnica de modificación de la dieta muy original, ya que establece parámetros de tiempo para las comidas en lugar de indicar un patrón de alimentación. También se diferencia de otros tipos de dieta porque no incluye pautas estructuradas de macro o micronutrientes, sino que se centra en los plazos.
Se basa en la filosofía y la observación de que estamos rodeados por un ambiente obesogénico. Es decir, que siempre tenemos comida disponible y que el fácil acceso a la comida para muchas personas no significa acceso a alimentos de buena calidad. Ya volveremos a eso. Pero, además, el consumo de alimentos fue cambiando y ahora implica varios parámetros, no solo la necesidad de aportar calorías a nuestro cuerpo, sino también aspectos emocionales o la necesidad de pasar el tiempo, entre otros hábitos similares.
Entonces, el ayuno intermitente surge a partir de la observación de que, originalmente vivíamos en un entorno en que la comida no era tan fácil de conseguir. Y, en realidad, servía para satisfacer nuestras necesidades energéticas y calóricas, y no mucho más. A partir de esa observación, se planteó la hipótesis de que, si podemos regular los horarios de nuestra ingesta calórica, el cuerpo puede regresar a esa homeostasis original cuyo objetivo era mantener nuestro equilibrio energético y evitar los trastornos metabólicos como la obesidad, la diabetes y las afecciones cardiacas.
Jamie DePolo: Bien. Si entiendo bien, no tiene tanta importancia lo que se come, sino cuándo se come.
Dr. Neil Iyengar: En su definición más técnica, eso sería correcto. Pero agregaría que la mayoría de los promotores del ayuno intermitente también incluiría la idea de que uno de los objetivos del ayuno intermitente es el control del peso. Por supuesto, hay que prestar atención a lo que se come y a cuánto se come. Pero sí, técnicamente es correcto decir que el ayuno intermitente no indica un patrón de alimentación específico.
Jamie DePolo: Bien. Para que la gente sepa, no significa que se pueden comer donas durante 5 horas al día y listo, ¿verdad?
Dr. Neil Iyengar: Exacto. Así es.
Jamie DePolo: Bien. Ahora, he leído sobre distintos tipos de estrategia de ayuno intermitente. Básicamente, se diferencian en la cantidad de horas de ayuno o para comer. ¿Alguna de esas estrategias es la más difundida o la que se considera estándar? Algunos proponen unas 8 horas para lo que se denomina intervalo de alimentación, que es el tiempo en que se puede comer. Otros dicen que deben ser 6 horas, y otros, 5. ¿Hay algún estándar? ¿O depende de cada persona y de los objetivos que se proponga?
Dr. Neil Iyengar: Es una pregunta muy importante. Creo que, a medida que la comunidad científica estudia el ayuno intermitente como herramienta no solo para bajar de peso sino también para prevenir enfermedades crónicas, debemos tener claro que el ayuno intermitente es un enfoque general, que abarca varios métodos que podrían tener resultados notablemente distintos según el criterio de valoración que tomemos.
Hay algunos abordajes del ayuno intermitente que son más habituales. Uno de los métodos, o una de las filosofías de base, del ayuno intermitente es mantener la simpleza y buscar un enfoque adecuado para el estilo de vida. Un método muy popular es elegir algunos días para el ayuno. Por ejemplo, mucha gente elige una relación de 5:2 y come normalmente durante 5 días de la semana pero, luego, consume muy pocas calorías, generalmente entre 500 y 800, los otros 2 días de la semana.
También está el ayuno con restricción de tiempo, o comidas con restricción de tiempo, como mencionó. Diría que el enfoque más habitual para la restricción del tiempo de comidas es establecer un ayuno de 14 a 16 horas por día. Se ayuna durante 14 a 16 horas por día y se limita la ingesta de comidas a un intervalo de entre 8 y 10 horas. Ese es otro método muy usado.
Hay un par de métodos más que vale la pena mencionar. Hay métodos en los que se alternan las actividades en un período de 24 horas, generalmente con el ayuno durante al menos dos períodos de 24 horas, y el resto de los días se come normalmente. Esto también puede interpretarse como un ayuno en días alternados, en cuyo caso se ayuna durante 24 horas, o se ingieren muy pocas calorías, tan solo unos cientos, día por medio.
Esos enfoques son los más habituales, y el tema aquí es que se selecciona un día o una franja amplia de horas para ayunar.
Jamie DePolo: Bien. Y originalmente se lo usaba para bajar de peso. ¿Cómo fue que algunos empezaron a pensar que quizás podría ser una herramienta para prevenir algunas enfermedades? ¿Fue porque el sobrepeso está conectado con ellas o hay algún otro factor?
Dr. Neil Iyengar: Creo que hay varios motivos por los que el atractivo del ayuno intermitente ahora incluye más que el descenso de peso.
Ciertamente, adelgazar es un factor que motiva el estudio de este enfoque. Sabemos que el sobrepeso o la obesidad aumenta el riesgo, no solo de trastornos metabólicos como la diabetes o las afecciones cardiacas, sino que también puede aumentar el riesgo de enfermedades como el cáncer. Hay al menos 13 tipos de cáncer que se vinculan con la obesidad. Se han hecho muchas investigaciones para analizar las técnicas para bajar de peso, ya sea para prevenir el desarrollo de estos tipos de cáncer vinculados con la obesidad o para prevenir la recurrencia del cáncer relacionado con la obesidad después del diagnóstico.
Por eso, cualquier estrategia adecuada para adelgazar seguramente resulta muy atractiva para estudiar la prevención de enfermedades, pero eso no es todo, por supuesto. Parte de lo que estudia mi equipo es cómo el estado crónico de disfunción metabólica puede generar células cancerosas. Sabemos que cuando el cuerpo tiene niveles crónicamente altos de insulina, de glucosa y de moléculas inflamatorias comunes en los trastornos metabólicos, todos estos factores sientan las bases para el desarrollo y el crecimiento de células cancerosas.
También son muy atractivos los enfoques que ayudan a reducir la exposición crónica a moléculas que favorecen el crecimiento del cáncer, como la insulina o las moléculas inflamatorias. Y el ayuno intermitente puede ser un método para llevar nuestro cuerpo a períodos de equilibrio metabólico en que esas altas concentraciones de insulina bajen significativamente. Ese tipo de equilibrio o balance energético también es muy atractivo y muy importante, y es uno de los motivos por el que se estudia este enfoque para la prevención de enfermedades.
Jamie DePolo: Bien. Gracias. Es una excelente conexión con mi próxima pregunta. ¿Qué tipo de investigaciones se han hecho hasta ahora? ¿Qué sabemos científicamente sobre el ayuno intermitente?
Dr. Neil Iyengar: Las investigaciones sobre prevención o reducción de riesgos del cáncer aún son muy tempranas. En cuanto a los trastornos metabólicos, hubo mucha actividad y se está trabajando mucho para analizar el ayuno intermitente como estrategia de adelgazamiento y como método para mejorar la diabetes o prevenirla.
Diría que el tipo de investigación sobre el que tenemos más datos es respecto del adelgazamiento. Pero son datos contradictorios, así que claramente necesitamos más datos para dilucidar algunos estudios que arrojaron resultados muy diferentes.
Y, cuando comenzamos a abordar la idea de reducir el riesgo de trastornos metabólicos como la diabetes o enfermedades crónicas como el cáncer, la mayoría de los datos surgen de investigaciones preclínicas o de estudios que no incluyeron a seres humanos. En este momento, se está trabajando mucho para intentar traducir esos datos de los modelos preclínicos a datos humanos.
Jamie DePolo: Muy bien. Cuando habla de investigaciones preclínicas, ¿se refiere a células y placas de Petri? ¿Ratones? ¿Qué se está observando?
Dr. Neil Iyengar: Sí. Al menos en el campo del cáncer, se trabaja mayormente con células y placas de Petri, aunque también se han hecho algunos ensayos in vivo con ratones, pero aún están en una etapa muy temprana.
Jamie DePolo: Bien. ¿Y tiene alguna desventaja el ayuno intermitente? Hemos recibido algunas preguntas al respecto en nuestra comunidad. Por ejemplo, para alguien que recibe tratamiento para el cáncer de mama. ¿Hay riesgo para alguien a quien no le diagnosticaron cáncer? ¿Y hay algún riesgo adicional o especial para alguien en tratamiento?
Dr. Neil Iyengar: Bueno, para alguien sin diagnóstico de cáncer de mama, diría que los riesgos del ayuno intermitente son, para comenzar, la interpretación de cómo hacer el ayuno intermitente. Lo mencionamos anteriormente. Me parece importante tener en cuenta que, con cualquier técnica de modificación de la dieta, para adelgazar hace falta una ecuación matemática. Básicamente, se necesita un valor calórico neto negativo. Es decir, ingerir menos calorías o quemar más calorías, o una combinación de ambas cosas.
Es importante tener en cuenta, especialmente con una dieta como el ayuno intermitente, que no comer durante un tiempo no nos da permiso para luego atracarnos cuando sí podemos comer. El peligro del ayuno intermitente es que la gente siente hambre. Al pasar períodos largos sin comer, hay que mantener el control cuando el cuerpo secreta hormonas que indican el hambre y que es necesario comer, lo cual es un desafío. La idea del ayuno intermitente es que entrenamos el cuerpo para que ese desafío sea cada vez más fácil de superar, pero sigue siendo un desafío.
El peligro para quienes tienen un diagnóstico de cáncer es que todavía no tenemos suficientes datos. No sabemos cómo les afectará esta dieta en cuanto a la calidad de vida ni en cuanto al cáncer. Somos optimistas en cuanto a la posibilidad de que sea una buena estrategia de adelgazamiento para algunas personas. Y, con algunos tipos de cáncer, como el cáncer de mama, es muy habitual subir de peso durante el tratamiento, por lo que una estrategia para adelgazar como el ayuno intermitente podría ser útil.
Sin embargo, hay algunos momentos en que se está cerca de la inanición. Si alguien está recibiendo quimioterapia o algún otro tipo de tratamiento que conlleva efectos secundarios, someter el cuerpo a ese estado podría llegar a aumentar la vulnerabilidad a esos efectos secundarios. Actualmente, hay estudios que evalúan si esto es así o no, pero hasta que tengamos esos datos debemos ser sumamente cuidadosos.
Si alguien quiere probar el ayuno intermitente, mi enfoque es que lo pruebe después de haber terminado el tratamiento, como la quimioterapia o la radiación. El peligro aquí es que, si los efectos secundarios se agravan, puede ser necesario interrumpir el tratamiento y no terminar el plan original de tratamiento. Por eso, es mejor esperar a terminar el tratamiento agudo o hacerlo bajo la estricta supervisión de un nutricionista que trabaje en equipo con el médico y el personal de enfermería. Si los efectos secundarios comienzan a agravarse y la dieta resulta más difícil de tolerar, se puede evaluar el cambio por otro enfoque de modificación de la dieta.
Jamie DePolo: Bien. Gracias. Algo me intriga. ¿En algunos de estos estudios se está analizando la calidad de la dieta en los momentos en que se come? Como dijimos antes, no se trata de un permiso para comer donas durante todo el tiempo en que se puede comer. Supongo que igual hay que prestar atención a los nutrientes y asegurarse de ingerir los nutrientes adecuados y las combinaciones adecuadas.
Dr. Neil Iyengar: Exacto. En muchos de los estudios se está explorando lo que comen las personas. Pero es complejo, ya que se busca diferenciar cuál es el efecto de la estrategia de ayuno intermitente y cuál es el efecto de implementar un cambio en el tipo de alimentos que se ingieren. Por ejemplo, si se hace un ensayo clínico en el que se evalúa una dieta a base de plantas, quizás no sea posible limitar los horarios en que se ingieren los alimentos, y la pregunta es directa: ¿resulta útil este tipo de dieta?
Sin embargo, implementar una intervención de ayuno intermitente presenta un desafío porque, si les decimos a los participantes qué deben comer, en realidad se están evaluando dos intervenciones. Por un lado, la restricción de tiempo con el ayuno intermitente y, por otro, el tipo de alimentos que se ingieren. Entonces, resulta complejo diferenciar cuál intervención generó los resultados que se observan.
La respuesta aquí, nuevamente, es regresar a la ecuación del equilibrio energético y recordar que la calidad de los alimentos es importante, pero, eventualmente, lo realmente importante es cuántas calorías e ingieren y cuántas se consumen.
Jamie DePolo: Bien. Ese es un excelente punto también. Debo reconocer que tengo dudas sobre algunos de estos estudios sobre dietas, no necesariamente sobre ayuno intermitente, sino de todo tipo de dietas, ya que muchos de ellos dependen de que los participantes informen con precisión lo que comieron. Y algo sé sobre la naturaleza humana, por lo que tiendo a pensar que si alguien deja de lado la dieta, es posible que no informe en qué medida se desvió, ya sea por satisfacer a los investigadores o por no dar la idea de que falló. Por ese motivo, siempre tengo mis dudas ante los estudios sobre dietas.
Dr. Neil Iyengar: Es un punto muy acertado. Justamente esa es una de las principales dificultades de cualquier intervención sobre el estilo de vida, incluidos los estudios sobre dietas. Nuestro grupo, y los demás, hacemos lo posible para mejorar y controlar ese aspecto. Claro, una de las cosas que hacemos en nuestros estudios sobre dietas es confiar en que los participantes nos informen qué comieron, pero también intentamos implementar herramientas que faciliten ese proceso. Supongamos que la persona se inscribe como participante en uno de estos estudios y dona su tiempo, y además debe asumir el gran compromiso de llenar varios cuestionarios y llevar un registro de lo que come. Por eso intentamos usar la tecnología y algunas aplicaciones y herramientas de diarios fotográficos que permiten sacar una foto de lo que comes para que luego nosotros hagamos el trabajo administrativo de calcular la ingesta calórica.
Y, quizás, lo más atractivo es que la comunidad científica está trabajando para desarrollar análisis de sangre que nos ayuden a tener una idea de lo que come la gente. Podríamos observar las moléculas y los metabolitos de la sangre para tener una idea de qué tipo de dieta llevan y qué alimentos se ingieren.
Jamie DePolo: Bien. No estoy segura, así que le pregunto. ¿Alguna vez le recomendó el ayuno intermitente a sus pacientes? ¿O todavía tiene reparos?
Dr. Neil Iyengar: Sí. Buena pregunta. Todavía no se lo he recomendado a nadie, básicamente porque necesitamos dos cosas. Al trabajar con el cáncer, necesitamos datos sobre seguridad, y también datos de eficacia en humanos antes de poder comenzar a recomendarlo.
Dicho eso, si estoy trabajando con alguien que tiene dificultades para adelgazar, evaluamos varias opciones distintas. Nuestro equipo también incluye la colaboración estrecha con un nutricionista. Generalmente, comienzo con esta idea: “Observemos el balance energético y veamos cómo podemos llegar a un valor neto levemente negativo para inducir un grado de adelgazamiento saludable que pueda sostenerse a largo plazo”. Y, si para esa persona el ayuno intermitente es un enfoque atractivo, no es algo que vaya a descartar, sino que lo tendremos en cuenta.
Pero, como dije antes, hay que tener mucho cuidado. Algo que les digo a mis pacientes, y que deseo destacar aquí, es que hay datos preclínicos sobre ratones que permiten sugerir que el ayuno intermitente ayudaría a reducir el tamaño de los tumores de cáncer de mama, especialmente en el caso de los tumores de cáncer de mama positivo para receptores de hormonas. También hay estudios, con ratones, que permiten sugerir que el ayuno intermitente podría ayudar a prevenir la resistencia a la terapia [hormonal] y a otros tratamientos del cáncer de mama.
Todos esos hallazgos son muy interesantes, solo es necesario validarlos en seres humanos. Siento que voy y vengo como un péndulo, pero quiero agregar que, el mes pasado, se publicó un estudio con seres humanos que tuvo resultados decepcionantes. Se usó ayuno intermitente, restricción del tiempo de comidas y ayuno de 14 a 16 horas por día, y al comparar a estos sujetos con un grupo que no tuvo intervención alimentaria alguna, no se observaron ni una asociación con el adelgazamiento ni diferencias entre los dos enfoques. Digo esto para demostrar que es un panorama en constante cambio y que debemos prestar mucha atención a los datos.
Jamie DePolo: Bien. Si bien ya lo comentó, me gustaría resumirlo. Si a alguien le interesa probar este ayuno, entiendo que no recomendaría que lo haga totalmente por su cuenta, sino que debería hablar con su médico o con un nutricionista. ¿Tiene algún consejo sobre cómo hacerlo?
Dr. Neil Iyengar: Sí. Completamente de acuerdo. Creo que es una conversación importante que se debe tener con el médico, especialmente para quienes reciben tratamiento por el cáncer. Y también es importante hablar del tema con un nutricionista, ya que podría aportar sugerencias interesantes. Por ejemplo, algunos alimentos dan mayor sensación de saciedad que otros. Claramente, con una dieta como el ayuno intermitente, es útil ingerir alimentos que te hagan sentir lleno y así prepararte para el ayuno. Consejos breves como ese pueden ser muy útiles, no solo por cuestiones de seguridad, sino también para prepararse mejor.
Jamie DePolo: Muy bien. Muchísimas gracias, Dr. Iyengar. Valoro el tiempo que nos ha dedicado y esta información.
Dr. Neil Iyengar: Un placer. Gracias por invitarme.
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