Terapia de compresión para la neuropatía

Varios estudios pequeños sugieren que la terapia de compresión puede ser una opción de bajo riesgo para reducir la neuropatía de la quimioterapia.
 

Si estás recibiendo quimioterapia para el cáncer de mama, existe la posibilidad de que experimentes hormigueo, entumecimiento o dolor en las manos y los pies, un efecto secundario conocido como neuropatía periférica (a menudo denominada simplemente “neuropatía”). Estos síntomas se producen cuando la quimioterapia provoca daños en los nervios que envían señales del cerebro a otras zonas del cuerpo.

Para reducir los síntomas de la neuropatía provocada por la quimioterapia (los médicos pueden denominarla “neuropatía inducida por la quimioterapia”), algunas personas prueban aplicarse una ligera presión en los brazos y las piernas, una técnica conocida como terapia de compresión.

 

¿Cómo funciona la terapia de compresión?

La terapia de compresión consiste en llevar una prenda de compresión, como un calcetín o una manga de compresión, que proporciona una presión suave durante la quimioterapia. La aplicación de esta presión ayuda a restringir el flujo sanguíneo a las manos y los pies, de modo que una menor cantidad de fármacos de quimioterapia puede llegar a estas partes del cuerpo. 

Aunque la mayoría de los estudios sobre la terapia de compresión realizados hasta la fecha han sido de poco alcance, los resultados sugieren que puede reducir las probabilidades de experimentar neuropatía inducida por la quimioterapia en algunas personas, afirma la doctora Melissa Accordino, oncóloga del Centro Oncológico Integral Herbert Irving de la Universidad de Columbia. Por ejemplo, un artículo de revisión de 2024 que reunió datos de cuatro estudios (con un total de 442 personas) descubrió que quienes recibieron terapia de compresión tenían menos probabilidades de experimentar neuropatía inducida por la quimioterapia que quienes no recibieron esta terapia. La mayoría de estos estudios se realizaron en China y los Estados Unidos, y tres de los cuatro se centraron en personas diagnosticadas con cáncer de mama.

En otro estudio, dirigido por Accordino, se comparó a 62 personas con diagnóstico de cáncer de mama que se dividieron en tres grupos: un grupo recibió terapia de compresión, otro recibió terapia de frío, y el tercero llevó guantes sueltos durante la quimio. El estudio descubrió que los participantes que recibieron terapia de compresión tenían tasas más bajas de neuropatía que las personas que recibieron terapia de frío. También eran más propensos a seguir el tratamiento durante 12 semanas.

Otros estudios sugieren que la terapia de compresión podría no ser para todo el mundo. Un estudio de 2022 sobre 78 personas con diagnóstico de cáncer de mama —incluidas 26 que recibieron terapia de compresión— no encontró diferencias en la neuropatía entre los dos grupos. En otro estudio realizado en Japón, participaron 56 personas con diagnóstico de cáncer de mama que llevaban un guante de compresión en una mano y nada en la otra durante la quimioterapia. Los investigadores descubrieron que los participantes tenían problemas similares de neuropatía en las manos, independientemente de si era la mano que recibía la terapia de compresión o no.

 

Otros beneficios de la terapia de compresión

Otros estudios sugieren que la terapia de compresión para reducir la neuropatía periférica también puede aumentar la calidad de vida. En el artículo de revisión de 2024, por ejemplo, se descubrió que las personas que recibían terapia de compresión durante la quimio tenían tasas más bajas de depresión que las personas que no recibían compresión o recibían un placebo (algo que hace que la gente sienta que está recibiendo un tratamiento cuando en realidad no es así). En otro estudio realizado en China, se descubrió que las personas con diagnóstico de cáncer de mama que recibían compresión durante la quimioterapia tenían menos ansiedad y depresión y dormían mejor que las personas que no recibían compresión.

 

Combinar la terapia de compresión con ejercicio, terapia de frío

Los investigadores estudian ahora si la combinación de la terapia de compresión con otras terapias puede ayudar a reducir aún más la neuropatía provocada por la quimioterapia. Por ejemplo, en un estudio realizado en China en 2024, se descubrió que combinar terapia de compresión con ejercicio puede reducir la neuropatía y mejorar la vida diaria y los síntomas más que la terapia de compresión por sí sola.

Los investigadores también están experimentando con la administración conjunta de compresión y terapia de frío para hacerla más tolerable. Accordino es investigadora principal en un ensayo en la Universidad de Columbia que está analizando los efectos de la terapia de compresión con terapia de frío en la neuropatía inducida por la quimioterapia. Los investigadores están reclutando participantes para el estudio. 

 

Cuándo utilizar la terapia de compresión

Accordino afirma que se necesitan más estudios y de mayor envergadura antes de que los médicos puedan sentirse cómodos recomendando el uso de la terapia de compresión durante la quimioterapia. Aun así, como las prendas de compresión no cuestan mucho dinero (oscilan entre 15 y 40 dólares por un par de guantes o calcetines, y entre 30 y 80 dólares por las mangas), algunas personas que reciben quimioterapia han decidido probar la terapia de compresión. 

La mayoría de los estudios hacen que las personas lleven prendas de compresión durante los 15 minutos previos a la quimioterapia, durante la infusión y durante los 15 minutos posteriores. No es necesario llevar prendas de compresión entre infusiones. Puedes probar diferentes mangas o calcetines de compresión que suban por los brazos y las piernas para encontrar opciones que sean lo bastante cómodas para llevarlas durante toda la infusión.

Los estudios sobre la terapia de compresión durante la quimioterapia sugieren que no existen riesgos graves ni a largo plazo, afirma Accordino. Sin embargo, aconseja hablar con el médico para confirmar que lo considere seguro antes de probarlo, sobre todo porque puede ofrecerte consejos, como qué tipo de prendas de compresión comprar.

 

Estudios futuros

Estudios más amplios con métodos más rigurosos —como comparar a las personas que reciben compresión frente a un placebo durante la quimioterapia— ayudarán a los investigadores a determinar si la terapia de compresión puede ayudar a reducir los riesgos de neuropatía inducida por la quimioterapia, afirma Accordino. Por ejemplo, los estudios anteriores no medían directamente cuánta compresión recibían las personas. Una forma en que los científicos esperan mejorar los métodos de estudio es midiendo y controlando directamente cuánta presión reciben los participantes en el ensayo durante la quimioterapia, afirma Accordino.

“Esperamos que nuestros ensayos de mayor alcance mejoren lo que se sabe para poder ofrecer una mejor orientación a nuestros pacientes sobre qué es eficaz, qué es seguro y cuál es la mejor forma potencial de reducir los efectos secundarios de la quimioterapia”, añade.

— Se actualizó por última vez el 31 de mayo de 2025, 21:47