Cobertura de seguro y pelucas
Para algunas personas con cáncer de mama, una peluca puede ser una vía de escape del recuerdo constante de los efectos secundarios de la quimioterapia y otros tratamientos. Pero las pelucas pueden ser costosas.
La buena noticia es que algunos planes de seguro cubren una parte o la totalidad del costo de una peluca en caso de caída del pelo relacionada con el cáncer. La mala noticia es que, aunque la peluca esté cubierta por el seguro, es posible que tú o alguien de tu confianza tengan que invertir tiempo en asegurarse de que los trámites se completen correctamente y puedas recibir el reembolso correspondiente.
Conocer el costo de las pelucas y las formas de reducirlo puede ayudarte a elegir la mejor opción.
¿Cuánto cuesta una peluca?
El precio de las pelucas puede oscilar entre menos de USD 30 y más de USD 4.000. Estos precios varían en función de si la peluca es de pelo sintético o humano, del estilo y de su calidad general. Por ejemplo, las pelucas de cabello humano oscilan entre USD 700 y 4.000, según Wigs.com (en inglés), mientras que los estilos sintéticos de Coils to Locs (en inglés) cuestan entre USD 100 y 135. Si buscas pelucas más económicas, podrías mirar las opciones de segunda mano en Internet; por ejemplo, eBay y Poshmark, Facebook Marketplace e Instagram tienen pelucas usadas a la venta.
Otros gastos asociados a las pelucas son un soporte para ellas (de USD 6 a 40), productos de limpieza (de USD 8 a 54), peines (de USD 5 a 15) y pegamento o cinta adhesiva (de USD 5 a 35).
Cobertura de las pelucas médicas: acierto o error
Dependiendo del tipo de seguro médico que tengas, es posible que tu aseguradora cubra una parte o la totalidad del costo de lo que las aseguradoras denominan “prótesis craneal” o “prótesis capilar” (nombres que reciben las pelucas médicas).
A continuación encontrarás información general sobre la cobertura de las pelucas médicas por parte de las aseguradoras de atención de salud:
Seguro privado: las aseguradoras y las pólizas varían. Consulta directamente con tu aseguradora.
Medicare (en inglés): la mayoría de los planes de Medicare, incluidos los de la Parte A y la Parte B, no cubren el costo de una peluca para la caída del pelo causada por la quimioterapia. Esto se debe a que estos planes no consideran que las pelucas médicas sean “médicamente necesarias” para tratar una afección específica. Si tienes un plan Medicare Advantage (también llamado “Medicare Parte C”), ponte en contacto con el servicio de atención al cliente para obtener más información sobre tu cobertura específica.
Tricare (en inglés): esta agencia destinada a los militares y sus familias cubrirá el costo de una peluca de por vida cuando un médico la recete por pérdida de cabello provocada por un tratamiento contra el cáncer.
Medicaid: en algunos estados, Medicaid reembolsará algunos de los gastos asociados a una prótesis capilar tras la quimioterapia o la radioterapia si ha sido indicada por un oncólogo.
Lo que debes consultar con la aseguradora
Investigar tu póliza en internet puede ayudarte a entender mejor por dónde empezar la conversación con tu aseguradora. Por ejemplo, puedes encontrar información en línea sobre servicios que tu aseguradora no cubre, como la operación estética para mejorar el aspecto físico.
Aunque pienses que has encontrado la respuesta en internet, es buena idea llamar directamente a la compañía de seguros y hacer preguntas concretas. Algunos ejemplos para empezar:
¿Mi póliza cubre parte o la totalidad del costo de una prótesis craneal o capilar? ¿Cuánto?
¿Cómo funciona la cobertura? (Por ejemplo, ¿pago el costo total de la peluca por adelantado y ustedes me lo reembolsan o el seguro rebaja el costo en el momento del pago?).
¿La cobertura es la misma más allá de que la peluca médica sea de cabello humano o sintético?
¿Qué documentación se necesita para tramitar la solicitud? (Las compañías de seguros suelen exigir una receta del médico, el recibo de compra de la peluca y un formulario completo de reclamación al seguro).
¿Qué información debe figurar en la receta de una peluca médica? ¿Existe una redacción específica o códigos de diagnóstico o procedimiento que mi equipo médico deba utilizar?
“[L]a mayoría de las aseguradoras de salud requieren que presentes una receta del médico con la redacción correcta”, cuenta Dianne Austin, a quien le diagnosticaron cáncer de mama en 2015 y creó la empresa Coils to Locs en 2019.
Organizaciones benéficas y bancos de pelucas
Si tu seguro no cubre el costo de una peluca médica o solo financia una pequeña parte, puedes consultar en los bancos de pelucas y las organizaciones benéficas que ofrecen pelucas gratuitas a las personas con cáncer.
Puedes ponerte en contacto con la delegación local de la Sociedad Estadounidense contra el Cáncer llamando al 1‑800‑227‑2345 o hablar con alguien especializado en trabajo social u otra persona del equipo médico para analizar las opciones más cercanas.
Otras organizaciones que proporcionan pelucas a personas en tratamiento para el cáncer:
Wigs and Wishes (en inglés)
Hair We Share (en inglés)
Verma Foundation (en inglés)
The Pink Wig Project (en inglés)
Otras formas de ahorrar en pelucas médicas
Puedes deducir de tus impuestos el total de los gastos médicos: tu plan de seguro determinará si tienes que pagar parte del costo de una peluca mediante el cumplimiento de un deducible, copagos o coseguro. Lleva un registro anual de tus gastos médicos. Estos incluyen los gastos por cuenta propia de una peluca, junto con los copagos, el coseguro, las tarifas de estacionamiento para las visitas médicas y el dinero que gastas para trasladarte de ida y vuelta a las citas. Si tus gastos médicos a final del año superan el 7,5 % de tu ingreso bruto ajustado, es posible que puedas deducirlos de tus impuestos, según el Servicio de Impuestos Internos. Para declarar tus deducciones médicas, necesitarás el Anexo A (Formulario 1040) (en inglés). Si no sabes con seguridad si alcanzas el nivel necesario para deducir tus gastos médicos de tus impuestos, sería conveniente que hables con una persona que pueda asesorarte en temas fiscales.
Considera la posibilidad de abrir una cuenta de gastos flexibles o una cuenta de ahorros para gastos médicos: si trabajas en relación de dependencia y recibes cobertura médica a través de tu empleador, podrías abrir una cuenta de gastos flexibles (FSA, sigla en inglés) o una cuenta de ahorros para gastos médicos (HSA, sigla en inglés). Estas se podrían utilizar para pagar una peluca médica, siempre que tengas un diagnóstico y una carta de necesidad médica del médico. Estos planes te permiten apartar dinero antes de impuestos; aunque sigues pagando la peluca con tu dinero, ahorras al no tener que pagar impuestos por esos ingresos.
— Se actualizó por última vez el 6 de diciembre de 2024, 19:07