Necrosis adiposa de mama (seno) tras la cirugía de reconstrucción con colgajo
¿Qué es la necrosis adiposa de mama?
Después de la cirugía de reconstrucción con colgajo (reconstrucción autóloga), en relativamente pocos casos, es posible que parte de la grasa del colgajo que se utilizó para reconstruir la mama no reciba suficiente riego sanguíneo. Con el tiempo, la grasa puede reemplazarse por tejido cicatricial firme que se siente como un bulto duro. El bulto puede ser tan pequeño como una arveja o podría ser una masa dura de mayor tamaño. Por lo general, no es evidente sino hasta 6 a 8 meses después de la cirugía, una vez que se ablande el colgajo de tejido y haya desaparecido la inflamación. Los médicos llaman a estos bultos “necrosis adiposa”.
A veces, zonas más pequeñas de necrosis adiposa se reducen o desaparecen solas. Las zonas más grandes de necrosis adiposa pueden provocar dolor y distorsionar la forma o la textura de la mama.
La necrosis adiposa también puede presentarse tras una lesión o daños al tejido mamario adiposo durante una biopsia o cuando se recibe radiación. La necrosis adiposa no es cancerosa (es decir, es benigna) y no aumenta el riesgo de cáncer de mama.
Síntomas de la necrosis adiposa de mama
En el caso de la necrosis adiposa, hay que prestar atención a cambios en la mama, por ejemplo:
bultos
piel engrosada, enrojecida, amoratada o con hoyuelos alrededor del bulto
dolor
retracción del pezón (cuando el pezón está metido hacia adentro)
Los bultos pueden sentirse duros y redondeados, como una arveja o una uva pequeña, o como una masa más grande y endurecida. Después de la reconstrucción con colgajo, es posible que no notes un bulto sino hasta que pasen varios meses, una vez que haya cicatrizado el colgajo y haya desaparecido la inflamación. Si sientes un bulto, infórmale al médico para que pueda examinarte y confirmar si tienes necrosis adiposa en la mama.
Diagnóstico de la necrosis adiposa de mama
Durante un examen físico, puede ser difícil para un médico saber si un bulto es necrosis adiposa de mama o un tumor posiblemente canceroso. Es posible que necesites hacerte una mamografía, una ecografía o una RM de mama para obtener un panorama más claro. Si los resultados de las pruebas por imágenes no muestran claramente necrosis adiposa, puede que necesites hacerte una biopsia para descartar el cáncer.
Tratamiento de la necrosis adiposa de mama
A veces, zonas más pequeñas de necrosis adiposa pueden disolverse o desaparecer sin ningún tratamiento. Las zonas más grandes de necrosis adiposa pueden provocar dolor e incluso distorsionar la forma o la textura de la mama, por lo que es necesario extirparlas con cirugía.
Un cirujano plástico corta la zona de necrosis adiposa o extirpa el tejido muerto con liposucción. Una de las ventajas de la liposucción es que es menos probable que quede una hendidura en el punto donde estaba la necrosis adiposa. Si te queda una hendidura o un hoyuelo, el cirujano plástico podría hacer lo siguiente:
cambiar de posición el tejido mamario a modo de relleno
hacer una reconstrucción con un colgajo pequeño para rellenar esa parte
utilizar un autoinjerto de grasa o inyecciones de grasa para ayudar a agregar volumen
Esta información fue posible, en parte, gracias al generoso apoyo de www.BreastCenter.com.
— Se actualizó por última vez el 27 de septiembre de 2023, 17:10