Cáncer de mama y COVID: cuidados durante las fiestas
La temporada festiva puede ser difícil después del diagnóstico de cáncer de mama, incluso aunque ya no estemos en pandemia. Desde que comenzó la pandemia de COVID-19, las personas que viven con cáncer de mama han enfrentado decisiones más difíciles sobre cómo abordar la temporada festiva.
Ahora contamos con más herramientas para cuidarnos que al comienzo de la pandemia, como vacunas, pruebas caseras de detección y medicamentos antivirales orales. Pero sigue habiendo motivos para ser prudentes. No sabemos en qué medida los casos de COVID-19 van a aumentar en esta estación. Están circulando nuevas variantes de ómicron, y no sabemos cuánto se propagarán. Además, ha habido un aumento repentino de casos relacionados con otros virus respiratorios, como el que causa la gripe y el virus respiratorio sincitial.
Ya sea que te hayan diagnosticado cáncer de mama recientemente o hace mucho tiempo, que te encuentres recibiendo tratamiento para la enfermedad o que vivas con cáncer de mama metastásico, es posible que estés preguntándote qué precauciones debes tomar durante las fiestas. Mientras evalúas decisiones relacionadas con traslados y reuniones con seres queridos, en este artículo encontrarás lo que necesitas saber sobre cómo manejar el riesgo y extremar cuidados.
La importancia de conocer tu riesgo
Si te diagnosticaron cáncer de mama, hay varios factores que pueden elevar tu riesgo de desarrollar un caso grave de COVID-19, aunque estés al día con tus vacunas y refuerzos contra la enfermedad.
Un sistema inmunitario debilitado (ser una persona inmunodeprimida): las personas diagnosticadas con cáncer de mama pueden estar recibiendo medicamentos que debilitan su sistema inmunitario. Los tratamientos que pueden debilitar el sistema inmunitario pueden incluir quimioterapia, ciertas terapias dirigidas, corticoesteroides en dosis altas y cirugía. La cantidad de tiempo que puede llevarle al sistema inmunitario recuperarse tras estos tratamientos varía de persona a persona. Si completaste el tratamiento para el cáncer de mama hace años o incluso meses, o si el plan de tratamiento no incluía terapias que debilitan el sistema inmunitario, es posible que no seas una persona inmunodeprimida. La mayor parte de las personas que recibieron tratamiento para el cáncer de mama en el pasado no están inmunodeprimidas a causa de eso.
Problemas pulmonares: en casos aislados, algunas personas pueden presentar problemas pulmonares como efecto secundario de algunos medicamentos de quimioterapia y terapias dirigidas. Esa situación puede elevar el riesgo de sufrir síntomas graves de COVID-19. Además, las personas que padecen cáncer de mama metastásico en los pulmones pueden tener problemas pulmonares que pueden empeorar si se contagian el virus que causa COVID-19.
Edad avanzada: el riesgo de enfermarse gravemente de COVID-19 es más alto en personas de 50 años en adelante, y el riesgo aumenta con la edad.
Otras afecciones médicas o discapacidades: el riesgo es más alto en las personas con ciertas afecciones o discapacidades, como enfermedades crónicas de los pulmones, del corazón o de los riñones, y diabetes. Fumar o tener sobrepeso también eleva el riesgo.
No vacunarse: las personas que nunca se vacunaron contra COVID-19 o que no están al día con su esquema de vacunación y refuerzos corren más riesgo de desarrollar la enfermedad.
Como la situación de cada persona es única, lo mejor es hablar con el equipo médico sobre cualquier factor que pueda elevar tu riesgo y qué precauciones debes tomar.
“Es importante preguntarle al equipo médico sobre cualquier factor de riesgo adicional que puedas tener en comparación con una persona promedio, por tu bien y por el de tu familia”, explica Julie L. Salinger, LICSW, MSW, del Instituto Oncológico Dana-Farber de Boston.
¿Qué puede hacer una persona para estar más protegida contra COVID-19 antes de las reuniones y viajes por las fiestas?
Mantenerse al día con las vacunas y refuerzos contra COVID-19 (incluida la dosis de refuerzo bivalente) es una de las mejores maneras de reducir el riesgo de infectarse e infectar a otros. Las vacunas contra la COVID-19 son seguras para todas las personas diagnosticadas con cáncer. Sin embargo, si tienes el sistema inmunitario debilitado, tu respuesta inmunitaria a las vacunas contra COVID-19 puede no ser tan potente. Los médicos pueden recomendarte que sigas un cronograma de vacunación distinto. Para obtener más información, puedes leer las recomendaciones sobre vacunación para personas inmunodeprimidas de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, sigla en inglés) y la guía de vacunación para personas con cáncer de la Red Nacional Integral del Cáncer (NCCN, sigla en inglés).
Otra manera importante de reducir el riesgo es usar correctamente una mascarilla, que se ajuste bien y cubra la boca, la nariz y el mentón cuando estés en interiores de lugares públicos, en reuniones en tu casa con personas ajenas a tu familia o cuando uses transporte público. Los respiradores N95 aprobados por el Instituto Nacional para la Seguridad y Salud Ocupacional (NIOSH, sigla en inglés) ofrecen más protección que las mascarillas de tela o las quirúrgicas desechables. Muchos proveedores de atención sanitaria recomiendan el sitio web Projectn95.org como un recurso confiable y sin fines de lucro para comprar mascarillas.
¿Cuál es la manera más segura de reunirme con seres queridos?
Si estás pensando en viajar o pasar tiempo en espacios interiores con personas que no viven contigo durante esta temporada festiva, gran parte de las sugerencias generales sobre cómo reducir el riesgo de infectarse o propagar el virus que causa COVID-19 siguen siendo las mismas que se han dado en los últimos dos años:
Consultar la cantidad de casos locales de COVID-19 y de otras enfermedades virales en la comunidad a la que planeas viajar. Si los casos aumentan rápidamente, considera la opción de cancelar los planes. Los CDC hacen un seguimiento de los niveles de COVID-19 en cada condado de los EE. UU. y los clasifican como bajo, medio o alto.
Invitar a un número reducido de personas a las reuniones festivas es más seguro que invitar a muchas personas.
Alentar a las personas con las que te reunirás a estar al día con las vacunas y los refuerzos contra la COVID-19 (incluida la nueva dosis de refuerzo bivalente) y la gripe.
Antes de pasar tiempo en espacios interiores, pedirles a los invitados que se realicen una prueba casera de COVID-19. Los CDC ofrecen sugerencias sobre cuándo y cómo realizárselas. Asegúrate de que todas las personas a las que invites sepan que, en caso de dar positivo en COVID-19, de tener cualquier síntoma de la enfermedad o si pueden haber estado cerca de alguien con COVID-19, deben quedarse en casa.
Reunirse en habitaciones o áreas más grandes de la casa, donde las personas puedan estar más separadas unas de otras.
Aumentar la ventilación en el lugar abriendo ventanas y puertas, o mediante el uso de purificadores de aire o ventiladores.
Pedirles a los invitados que usen mascarillas dentro de la casa y que coman y beban afuera. Esto se puede solicitar si sientes que debes extremar cuidados.
Como alternativa a las reuniones presenciales, puedes evaluar la posibilidad de organizar una celebración festiva virtual. Puedes fijar un horario que les convenga a todos y estructurar el evento en torno a una o más actividades virtuales, como compartir una comida, jugar Bingo o juegos de conocimientos, abrir regalos o ver una película a través de un servicio de emisión grupal, como Teleparty.
“Independientemente de los niveles personales de riesgo, es importante para los seres queridos respetar aquello con lo que cada uno se siente cómodo este año”, agrega la Dra. Elizabeth Robilotti, MPH, médica asistente de planta del Hospital Quirúrgico Especial y profesora adjunta de Medicina en la Facultad de Medicina Weill Cornell.
“Uno de los mensajes más importantes que podemos transmitir para celebrar las fiestas de manera segura y con felicidad es ser respetuosos de los límites de cada uno, no obligar a nadie a estar en un lugar en el cual no está preparado para estar”, afirma.
Pero no todos los familiares piensan de la misma manera. Puede ser difícil hablar de por qué tu nivel de riesgo o tolerancia puede ser diferente. Pero es importante tener estas conversaciones, especialmente para asegurarte de que tus seres queridos sepan que deben quedarse en casa si se sienten mal o si estuvieron (o pueden llegar a estar) en contacto con una persona enferma.
Es fundamental que te sientas a gusto a la hora de comunicar lo que es mejor para ti.
Visita la comunidad en línea de Breastcancer.org para hablar sobre los efectos de COVID-19 con otras personas afectadas por el cáncer de mama.
Puedes leer sugerencias de integrantes de la comunidad acerca de cómo sobrellevar el aislamiento durante la pandemia de COVID-19.
Y puedes obtener más información sobre el manejo del cáncer de mama, la COVID-19 y la depresión invernal.
— Se actualizó por última vez el 15 de febrero de 2023, 13:58