Reiki: qué es y cómo ayuda a las personas diagnosticadas con cáncer
La Dra. DuPree estudió medicina en la Universidad Hahnemann de Filadelfia e hizo sus estudios de pregrado en neurociencia conductual e historia y filosofía de la ciencia en la Universidad de Pittsburgh.
Su primer libro, The Healing Consciousness: A Doctor’s Journey to Healing (La conciencia sanadora: trayecto de una médica hacia la sanación) se publicó en 2006 y recibió excelentes reseñas de la Dra. Christiane Northrup y el Dr. Bernie Siegel, entre otros reconocidos expertos del campo de la salud de la mujer. Entre sus numerosos reconocimientos se incluye el Premio Humanitario Clara Barton de la Cruz Roja de Estados Unidos por sus contribuciones continuas al tratamiento del cáncer de mama. Fue seleccionada por sus colegas para integrar la lista de cirujanos destacados de Philadelphia Magazine en 2016 y 2017. Forma parte del comité asesor de Breastcancer.org y suele organizar chats en vivo y podcasts sobre temas actuales vinculados con el cáncer de mama.
En el podcast, la Dra. DuPree explicará lo siguiente:
- Mensaje del patrocinador
qué es el reiki y cómo lo usa en su práctica
- Mensaje del patrocinador
qué ocurre durante una sesión típica de reiki
- Mensaje del patrocinador
los beneficios del reiki para las personas con diagnóstico de cáncer
- Mensaje del patrocinador
tres cosas que deberías saber antes de probar el reiki
Afiliaciones: The Cancer Centers of Northern Arizona, Flagstaff, AZ
Áreas de especialización: tratamiento del dolor posoperatorio, bienestar mental generalizado, terapias psicodélicas revolucionarias, Reiki, medicina integradora
La Dra. DuPree es una experta innovadora en el tratamiento para el cáncer de mama reconocida a nivel nacional e internacional. Su pasión por potenciar la sanación en sus pacientes durante la experiencia del cáncer la llevó a desviar su atención del quirófano para convertirse en asesora médica de empresas de vanguardia centradas en diversos aspectos de la supervivencia. Entre sus intereses actuales, se incluyen el tratamiento del dolor posoperatorio, el bienestar mental generalizado y las terapias psicodélicas revolucionarias.
— Se actualizó por última vez el 29 de marzo de 2025, 18:58
Jamie DePolo: Hola a todos. Soy Jamie DePolo, editora sénior de Breastcancer.org. La invitada de nuestro podcast de hoy es Beth Baughman DuPree, cirujana general certificada por el consejo, especializada en afecciones mamarias y con una certificación adicional en medicina integral. También es maestra de reiki.
La Dra. DuPree forma parte de la clínica Sedona Breast Care Clinic del sistema de atención sanitaria del norte de Arizona. Estudió medicina en la Universidad Hahnemann de Filadelfia e hizo sus estudios de pregrado en neurociencia conductual e historia y filosofía de la ciencia en la Universidad de Pittsburgh.
Su primer libro, The Healing Consciousness: A Doctor’s Journey to Healing (La conciencia sanadora: trayecto de una médica hacia la sanación), se publicó en 2006 y recibió excelentes reseñas de la Dra. Christiane Northrup y el Dr. Bernie Siegel, entre otros reconocidos expertos del campo de la salud de la mujer.
Entre sus numerosos reconocimientos se incluye el Premio Humanitario Clara Barton de la Cruz Roja de Estados Unidos por sus contribuciones continuas al tratamiento del cáncer de mama. Fue seleccionada por sus colegas para integrar la lista de cirujanos destacados de Philadelphia Magazine en 2016 y 2017. Forma parte del comité asesor de Breastcancer.org y suele organizar chats en vivo y podcasts sobre temas actuales vinculados con el cáncer de mama.
La Dra. DuPree hoy nos acompaña para hablar sobre el reiki, sobre cómo lo usa en su práctica y sobre cómo puede ayudar a las personas con diagnóstico de cáncer de mama. Bienvenida al podcast, Dra. DuPree.
Dra. Beth Baughman DuPree: Gracias, Jamie. Gracias por invitarme.
Jamie DePolo: Para comenzar, en caso de que alguien no sepa, ¿podría explicarnos qué es el reiki?
Dra. Beth Baughman DuPree: Perfecto. Es la pregunta perfecta porque me la hacen todo el tiempo. Como hace varios años yo no sabía lo que era el reiki, suelo bromear con que lo único a lo que podía hacerle reiki era a las hojas del jardín, y tengo un jardín enorme, así que hay muchas hojas. El reiki significa... Es la unión de dos palabras: “rei” y “ki”, que representan una fuerza superior o una fuerza vital. Al unir esas palabras, hablamos de una energía de la fuerza vital guiada por la espiritualidad. No se trata de una religión o una práctica religiosa. Es focalizar la intención de la energía vital que pasa a través del terapeuta hacia el receptor.
Es una práctica que existe desde hace miles de años. Mucha gente confunde el reiki con un toque sanador o un masaje, ya que hay muchos terapeutas que practican diversos aspectos del reiki o que hacen reiki como complemento de otra modalidad de sanación, pero el reiki en sí es una forma de tratamiento sin contacto en el que la energía vital pasa a través del terapeuta, quien funciona como transmisor, no como generador. La fuerza vital no surge de la persona que hace la sesión, simplemente pasa a través de nosotros.
La forma de reiki que yo estudié fue creada por el Dr. Mikao Usui, un hombre japonés que vivió en el siglo XIX y murió en 1926. Él redescubrió los orígenes del reiki, que existía desde muchísimo antes, y las transmitió a otro sanador, un médico de Hawái que vino a los Estados Unidos continentales en los años 1940.
Es una tradición muy prolongada que se transmite de un maestro al siguiente, y al siguiente. Yo me capacité con Nancy Sacks, quien fue mi maestra de reiki en la costa Este y quien me capacitó en la técnica del Dr. Usui.
Jamie DePolo: Excelente. ¿Y qué ocurre durante una sesión típica de reiki? ¿Qué debería esperar el paciente?
Dra. Beth Baughman DuPree: Bien. Es una pregunta interesante, porque con frecuencia escucho: “Hice una sesión de reiki y no sentí nada”. Cuando alguien va a una sesión de sanación esperando un masaje, que lo toquen o con alguna otra expectativa, quizás no obtenga de la sesión todo lo que podría si pudiera liberarse de otras cuestiones.
La idea del reiki es estar presente y dejar ir todo lo que nos rodea. Cuando alguien va a una sesión de reiki, se acuesta en una camilla de masajes, y el terapeuta generalmente comienza colocando las manos por encima de la cabeza del paciente, sin tocarla. Algunos terapeutas tocan al hacer reiki, pero en la línea que yo sigo, no hay contacto físico. Y entonces la fuerza vital comienza a fluir del terapeuta hacia el individuo. Muchas veces, quien la recibe dice que le pareció sentir que alguien lo tocaba o que podía sentir el campo de energía entre las manos del terapeuta y su cuerpo.
A medida que la sesión avanza, el terapeuta traslada o dirige la energía a partes del cuerpo de la persona o a los centros de energía donde es necesaria. No es como un masaje en el cual se comienza con la espalda, luego se pasa a las piernas, a los brazos, a la sien, y así sigue... Me encantan los masajes porque son sumamente relajantes y son geniales junto con una sanación energética. Pero, con el reiki, la mayoría describe que percibe una sensación de paz, de conexión, de bienestar. A veces, se sienten más livianos, porque se desprenden energéticamente de cosas que absorbían su energía corporal.
Jamie DePolo: Antes de profundizar en su uso del reiki, ¿qué le llevó a convertirse en terapeuta? ¿Le atraía algo en particular de ese proceso de sanación (si esa es la palabra correcta)? ¿Qué le llevó a querer capacitarse?
Dra. Beth Baughman DuPree: Pues, soy cirujana. Me enseñaron que nada cura mejor que el acero frío, es decir, el bisturí, y que cortar es sanar. Por lo tanto, al cortar el cáncer curas al paciente. Me formé como cirujana en el centro Albert Einstein de Filadelfia, donde me capacitaron cirujanos excelentes que me ayudaron a desarrollar mis habilidades quirúrgicas. Y eso es un gran don, ya que puedo extirpar el cáncer, restaurar el tejido para que se vea lo más normal posible y hacer cirugías de cáncer de mama realmente fenomenales.
El problema con la cirugía es que es la manifestación física de lo que hacemos con un paciente para extirpar el cáncer. Pero solía imaginar que sería genial si alguien pudiera crear un dispositivo quirúrgico que cortara el temor tal como yo podía cortar el cáncer. De esa forma, podría decirle a mis pacientes: “Esta operación te va a llevar a un punto en que te sentirás saludable, entero y pleno, para que puedas abandonar los temores y soltar”. Por eso, creo que en mi experiencia como cirujana reconozco que nunca me sentí como alguien omnipotente que hace un trabajo maravilloso de sanación, sino como una técnica. Es decir, la cirugía era una parte técnica del proceso.
Aprendí algo de mis amistades a quienes le diagnosticaron cáncer, y fueron muchas: un médico con diagnóstico de cáncer colorrectal metastásico al momento del diagnóstico, otro médico al que le diagnosticaron melanoma metastásico. Otro colega a quien le diagnosticaron enfermedad de Lou Gehrig. Una médica a la que le diagnosticaron un tumor cerebral durante el embarazo.
Y Lauren fue... Diría que ella fue mi mayor catalizador, ya que su diagnóstico de cáncer cerebral fue alrededor de 1997 o 1998. Creo que era 1997. Y ya estaba dispuesta a aceptar que las pacientes necesitaban más de lo que estábamos haciendo. Necesitaban más que solo una operación. Y cuando Lauren recibió una prognosis desalentadora tras su diagnóstico de cáncer de cerebro, empezó a investigar, porque ella es médica. Quería otra respuesta. “¿Por qué recibo esto? Por qué todas estas personas, que son médicos, a nuestro alrededor...” Nosotros somos la profesión, y si nuestra profesión no puede curar a sus propios miembros o ayudar a cada persona en su proceso, significa que hay algo que nos falta.
Así que Lauren fue fenomenal, porque empezó a buscar en otros lugares. Cumplió con toda su medicina occidental tradicional, y es aquí que se inserta el reiki como una modalidad complementaria, no como una alternativa. Entonces, lo que hizo fue cirugía, quimioterapia y radiación para su tumor cerebral, pero, entretanto, alguien de su iglesia le habló del reiki. Y me contó sobre lo que estaba haciendo y yo, siendo la típica cirujana que soy, en lugar de participar en una sesión le dije: “Bueno, vamos a inscribirnos y ver cómo lo haremos”.
Mi amiga, Amy Harvey, mi asistente médica, Beth Matlock, y yo nos inscribimos en un curso de reiki de nivel uno. Yo literalmente solo llegué al curso de nivel uno, sin saber nada de lo que era esto. Solo sabía que mi amiga tenía un diagnóstico de cáncer de cerebro. Para yo poder acompañarla en su camino y estar presente a su lado, tenía que desacelerar un poco para descubrir qué era lo que le estaba ayudando.
Así que el curso inicial de reiki fue toda una transformación para mí. Estaba de guardia, pero mi teléfono no sonó, lo que es todo un milagro. Durante ese fin de semana, en el centro holístico del Saint Mary Medical Center en el condado de Bucks, pasé mucho tiempo concentrada, manteniéndome presente en el momento. Y mientras aprendía las técnicas, me iba a casa en la noche y mis hijos... En ese entonces el menor era muy pequeño para darse cuenta, pero el mayor, Tom, no tenía idea de lo que era el reiki cuando empecé a hacerlo. Así que hice que se tendiera en el suelo y practicar las técnicas que estaba aprendiendo. Y ya sabemos cómo es el cerebro de un niño, no es que está buscando algo en Google o averiguando qué es lo que debe sentir en una página web. Él me describió una sensación de paz, un calor y la energía asombrosa que podía sentir. Y yo pensé: “¡Guau! En verdad esto tiene poder”.
A medida que avanzaba del nivel uno al nivel dos, y luego a niveles avanzados de reiki, me di cuenta que lo que esto hacía por mí era mantenerme presente en el momento. Hacer que estuviera presente con mis pacientes. Hacerme reconocer que esa conexión de energía que puedo crear con mis pacientes es muy poderosa. Ya sea que lo conozcas como reiki o no, o...
Es algo que no solo se enciende y luego se apaga. Quiero decir que no... Algunos me han preguntado: “Bueno, ¿cómo lo activas y lo desactivas?” Y yo les digo: “Bueno, no es algo que se enciende y se apaga”. Se trata de mantenerte abierta y permitir que ese nivel de energía conectada fluya entre dos seres humanos libremente. Y así, desde ese primer fin de semana, me di cuenta que esto era algo muy poderoso. Muchas personas dicen: “Bueno, se podría decir entonces que es el poder de la oración” o… Y yo les digo que es una fuerza divina, y no importa qué fuerza divina sea, es real.
Jamie DePolo: Y cuando dice que no es algo que se enciende y se apaga, lo que interpreto es que siempre está haciendo algún tipo de reiki con las personas con las que está en contacto. ¿Se refiere a algo así?
Dra. Beth Baughman DuPree: Sí, porque mi forma de hacer reiki no es hacer que un extraño venga y se acueste en la camilla y reciba una sesión, que es lo que hacen muchas personas. Muchos profesionales de reiki lo hacen para ganarse la vida, y es la manera en la que ellos brindan sus servicios. Para mí... Porque cada día veo más pacientes que tienen un bulto en la mama o tienen un diagnóstico de cáncer u otra inquietud médica. Desde mi perspectiva no es algo que se activa y se desactiva. No es que ocurre un momento consciente en mi cerebro donde digo: “Okay, voy a hacer mis símbolos”.
Más bien, siempre estoy en ese modo. Y es difícil, porque se ha convertido en una parte tan grande de lo que soy y cómo hago lo que hago, porque esa fuerza vital que conecta dos seres humanos es ese vínculo energético que... Hay un estudio reciente que apareció en el New York Times, que muestra que las pacientes se sienten mejor cuando tienen esa conexión compasiva con sus médicos. Y yo leí el artículo. Y me dije: “Bueno, no es una sorpresa”, porque para mí es la conexión que nace de la intención de sanar.
Y sé que quizás preferirías que fuera más específica, pero es una relación casi indescriptible la que creamos. Y las pacientes me dicen... Tengo una paciente de Bryn Mawr que es adorable. Es una paciente que tengo desde hace tiempo, una amiga. La conocía desde que recién empezaba a hacer reiki. Y no es que le dije: “Escucha, voy a hacerte reiki cuando estés dormida en la sala de operaciones”. Pero cuando mis pacientes están en la sala, antes de que reciban la anestesia, yo entro con ellas, estoy con ellas desde el momento que reciben el Versed o lo que sea que se les administre en la etapa preoperatoria. Y cuando estamos en la sala de operaciones, tengo mi mano en su corazón y tomo su mano derecha con mi mano izquierda. Y ese es el momento cuando la energía del reiki fluye.
En ese momento también uso técnicas de imaginación guiada, porque les pregunto a las pacientes “¿Dónde te gustaría ir? ¿Cuál es tu lugar favorito en todo el mundo?” Porque no puedes sentir temor al mismo tiempo que sientes amor. Y cuando logras que esa persona reconozca o diga cuál es su lugar favorito en todo el mundo, se pone contenta. Está pensando en la playa, las montañas, su jardín. Algunas me dicen “trabajando de nuevo”, porque esto significa que dejaron atrás al cáncer.
Es algo que las saca del modo de temor, que las devuelve al momento. Es cuando fluye lo que yo conozco como fuerza vital universal. Una de mis pacientes se despertó después de la cirugía y dijo que nunca había sentido esa fuerza vital de nadie más que no fuera su esposo, durante la temporada en la que concibieron. Pero sintió esa increíble conexión de energía conmigo, y le habían administrado Versed. Tenía medicamentos que se supone que te hacen olvidar. Pero ella me contó toda la experiencia, exactamente como sucedió.
Es gracioso, porque hemos hablado de lo que pasó después, y ella ha tenido una recuperación maravillosa, trabajando con pacientes y ayudándolos en este proceso, porque no solo se trata de sanar el cuerpo físico. Es sanar el espíritu y el alma, para regresar a un lugar seguro en tu vida.
Así que, desde mi perspectiva, el proceso completo es... ha sido un ímpetu hacia delante, fluido, que nunca se detuvo desde que empezó.
Jamie DePolo: Es como si... Nos ha contado cómo usa el reiki en su vida profesional. Si hay algo más que nos quisiera decir, adelante, pero también, ¿cuáles cree que son los beneficios —para una persona diagnosticada con cáncer de mama o cualquier tipo de cáncer— de pasar por este proceso curativo, de pasar por este proceso con usted?
Dra. Beth Baughman DuPree: Lo uso personalmente, como profesional de la salud, antes, durante y después de las biopsias de mama, porque las pacientes están conscientes cuando esta ocurre. Cada vez que una paciente se duerme en la sala de operaciones. Y en mis consultorios profesionales tanto en Holy Redeemer como aquí en Northern Arizona, mi fundación, la Healing Consciousness Foundation, ofrece servicios de salud para pacientes de manera gratuita.
Así que los pacientes reciben reiki y pueden programar una sesión. Porque a menudo durante la sesión salen muchas cosas, además de solo sentir la energía fluir. Muchas veces observamos emociones liberadas y el abandono de los problemas.
Lo sabía cuando llegué a Sedona, incluso desde antes... Fue interesante, porque no estaba pensando mudarme aquí el año pasado. Fue algo que solo pasó; esa región en verdad me llamaba. Cuando llegué al centro de cáncer en Sedona, entré y me presentaron al Dr. Beyer, el oncólogo radioterapéutico, y luego me mostraron el lugar, había un cuarto para reiki, que... cada paciente que llega para recibir radiación recibe reiki sin costo alguno, gracias a la NAH Foundation, lo que es un regalo maravilloso. Y yo pensé: “¡Guau! Esto es como una nave espacial hecha para mí”, un lugar donde las personas de la organización ya estaban reconociendo el poder del reiki.
Y le pregunté al Dr. Beyer sobre eso, porque él es fue presidente de ASTRO [Sociedad Estadounidense de Oncología Radioterápica], un hombre brillante, oncólogo radioterapéutico fenomenal que sabe mucho sobre energía. Y, a decir verdad, él me dijo hace dos semanas: “Lo que necesitamos de verdad es hacer un ensayo clínico sobre esto, porque creo que los pacientes progresan más cuando llegan a la radioterapia después de recibir reiki”.Sociedad Estadounidense de Oncología Radioterápica (ASTRO) Y esta es una afirmación poderosísima de un gurú de la oncología radioterapéutica occidental, formado tradicionalmente, que comprende muy bien lo que está pasando.
Así que lo usamos en nuestro centro de cáncer aquí en Sedona, y lo reciben los pacientes de radioterapia. No solo las pacientes diagnosticadas con cáncer de mama. Todos los pacientes de oncología tienen acceso al reiki. Y tenemos muchos profesionales a través de mi fundación que, tanto en la costa este como aquí en Sedona, están abiertos y dispuestos a ver pacientes.
Y cuando una paciente me pregunta: “¿Y yo por qué debo hacer esto? ¿Cuál es el beneficio para mí?” Yo les digo: “Es algo sencillo, ¿sabes? Yo puedo extirpar el cáncer. Te puedo mandar a quimioterapia para luchar contra esas células. Puedo mandarte a radioterapia para evitar que el cáncer regrese. Puedo recomendarte que modifiques tu estilo de vida para que se reduzca tu riesgo. Pero lo único que personalmente no puedo hacer es liberarte del miedo que el cáncer representa. Y uno de los mejores regalos que creo que el reiki les da a los pacientes es permitirles disipar ese miedo. Y cuando el miedo se disipa, significa que has llegado un maravilloso lugar de sanación”.
O les digo que se trata de paz en tu corazón que sobrepasa toda comprensión. Es la paz en tu corazón que te da el saber que has hecho todo lo que puedes para tratar un cáncer y ahora está fuera de tus manos. Es algo que tiene que salir de tus manos y pasar a manos de Dios al mismo tiempo, porque si alguien está sentado en su cocina esperando a que regrese el cáncer, su vida está paralizada, aún si ya está curado físicamente. Y he tenido pacientes diagnosticadas con cáncer de estadio IV que han mostrado niveles increíbles de sanación, no solo gracias al reiki, sino a otras modalidades de sanación, en las que reconocen que cada día que están vivas en este mundo es un regalo y que ellas deciden cómo vivirlo.
Así que ha sido un excelente complemento de mi formación médica occidental, porque me ha abierto los ojos y ahora veo el poder de la medicina integral y las modalidades complementarias, junto con los tratamientos médicos occidentales, que es lo que reciben mis pacientes. No soy médica alternativa. Ese es un punto fundamental. No es medicina alternativa. Es medicina integral. Y es medicina complementaria. Y estas son modalidades que en verdad van de la mano. Medicina oriental y occidental. Son dos grandes poderes que van de la mano.
Jamie DePolo: Ahora, nos contó que un colega dijo que debería hacer un ensayo clínico. ¿Se ha hecho investigación sobre el reiki y sus beneficios, o la mayoría son experiencias anecdóticas de personas como usted, que lo integraron a sus servicios?
Dra. Beth Baughman DuPree: De hecho se hicieron dos estudios. Uno se publicó en 2017 en Italia y el otro —lo acabo de buscar— el otro se hizo en Brasil. Pues, en los Estados Unidos no hemos hecho muchos ensayos clínicos sobre el reiki. Y una de las cosas más difíciles para mí, en estos momentos, es que yo conozco los enormes beneficios que obtienen mis pacientes del reiki, así que sería muy difícil asignar a algunos de ellos a que no lo reciban. Pero para mí, un ensayo que tendría la mejor eficiencia y nos daría la mayor cantidad de datos se debería hacer en un centro donde no se haya usado el reiki. Un lugar donde los médicos no tengan un motivo, donde la mitad de los pacientes lo reciban y la otra mitad no. Y sería maravilloso organizar ese ensayo. Y es algo que está en mi lista de cosas pendientes que hacer en mi tiempo libre.
De los dos ensayos que se hicieron sobre el reiki y su eficiencia, uno de ellos observó masajes y masajes con reiki. En ese ensayo, los pacientes que recibieron reiki junto con masajes mostraron mayores beneficios que los que solo recibieron masajes. De esa manera se randomizó este ensayo, y el ensayo fue excelente porque los pacientes recibieron algo. Recibieron el toque sanador. Recibieron el componente sanador, así que se observó una clara diferencia entre los dos.
En el ensayo que se hizo en Italia, esencialmente se observó cómo se recibía el reiki o cómo fue la respuesta, en los casos de pacientes que estaban dispuestos a recibirlo. Así que los dividieron en un grupo que estaba dispuesto a recibirlo y otro que no lo estaba. Luego, el grupo dispuesto mostró menos ansiedad, menos estrés y un mayor nivel de bienestar en general, lo que... como que se relaciona con... como cuando te comenté que algunas me decían que no sentían nada con el reiki. Es como si entras y tus persianas están cerradas, y estás herméticamente aislado del resto del mundo. Y no quieres dejar que nadie entre. No vas a tener un beneficio, porque no estás abierto. Y de la misma forma que el reiki es energía universal que fluye a través de quien lo administra, quien lo recibe tiene que estar abierto y dispuesto a recibirlo. Podríamos decir que ese estudio italiano dio en el clavo para mí, porque si te vas a cerrar y no vas a estar abierta a la sanación, no creo que importe qué modalidad sea, porque estás como aislado del resto del mundo. Hay personas que no quieren por nada del mundo recibir un masaje, porque no quieren que nadie los toque por ninguna razón.
Así es que el reiki es una gran manera para algunos que —ya sea por una experiencia de maltrato o porque no quieren ese contacto físico— el reiki es asombroso porque también se puede hacer de forma remota. Mi amigo estuvo hospitalizado en Main Line por un problema cardíaco, y yo llamé a una amiga, Jodi, que es una excelente practicante de reiki. Y yo bromeaba diciendo: “Tienes que darle el choque”, aunque no es nada eléctrico, pero es un término un poco energético. Y yo decía: “Este amigo mío necesita una conexión de energía, y esta energía y este amor”. Así que nos unimos y le dimos esta energía de amor y esta energía de reiki.
Estoy en un grupo con… Ni sé cuántas mujeres hay en el grupo ahora. Éramos como 33 en los últimos 2 años —hacemos un curso donde una vez a la semana... es como un proceso de meditación en que nos enfocamos no solo en cuidar a los demás, sino también en autocuidarnos y observar la divina energía femenina. Y no es femenina contra masculina. Es la divina energía femenina. Y en ese grupo, cuando alguien está enferma, se lo dice al grupo, y todas elevamos esa consciencia y esa energía en torno a la persona que las necesita. Y, dado que el reiki es una forma de sanación, no tienes que tocar a alguien, lo puedes hacer de manera remota.
Jamie DePolo: ¿Hay algún efecto secundario? Quiero decir, parece increíblemente positivo. Solo por curiosidad.
Dra. Beth Baughman DuPree: Aún no sé de alguien de que se queje o hable de efectos secundarios, solo sé que se sienten de lo mejor después o que quieren recibir más. Me encanta que los pacientes reconozcan... dicen: “Hay algo diferente en la manera que haces lo que haces”. Y yo lo he visto con mi equipo en la sala de operaciones aquí en Arizona. Quiero decir, no me conocen de ninguna parte cuando llego y que el equipo...
¿Sabes? Las luces están bajan en la sala cuando entra la paciente. Por lo general tengo de fondo... es Om, es el sonido sagrado del Om que suena muy bajo. Casi ni se escucha. Pero lo que hace es definir la intención de todos en la sala, crear el espacio sagrado en esa sala de operaciones, donde todos reconocemos que la persona se ha confiado a nosotros y nos ha dado permiso para que la cuidemos. Es un viaje sagrado y un proceso sagrado.
Y las pacientes... en el pasado algunos anestesiólogos me han dicho: “Le di Versed, no va a recordar nada”. Y yo les respondo, “Nuestro subconsciente sabe”. Quizás no podemos reexaminarlo ni podemos vivirlo, pero la manera cómo lo hacemos, y qué hacemos, y el proceso de llevar al paciente a un lugar seguro tiene un efecto increíble, no solo en la paciente, sino también en las demás personas en la sala, solo porque todas están enfocadas en esa persona. Nadie trae las cargas de su vida personal a esa sala, porque es un espacio sagrado. Y si ese espacio sagrado es perturbado, trabajar en él ya no es divertido.
Jamie DePolo: Eso me lleva a una pregunta. Quiero saber si hay alguien en este equipo —bueno, no parece que lo haya— que quizás no sea muy receptivo al reiki o no crea que funcione o, incluso, si hay alguna paciente que no cree que marque ninguna diferencia. Me estoy refiriendo al estudio que mencionó, donde había personas que no estaban dispuestas o no se beneficiaron mucho. ¿Intenta convencer a esta persona o dice: “¿Ah, no? Está bien”? ¿Qué le dice a alguien que piensa “Esto es un montón de tonterías”?
Dra. Beth Baughman DuPree: Bueno, hay personas con creencias religiosas —me han tocado algunas— que me han dicho: “Yo sé que usted hace reiki, y no deseo recibirlo”. Y yo les digo: “Es una decisión completamente suya, su elección, su opción”, pero yo me voy a mantener presente para esa persona. Voy a seguir tomándola de la mano cuando se duerma. Pero en ese momento hago un esfuerzo consciente de honrar las creencias y valores de esa persona.
A menudo rezo con mis pacientes antes de la cirugía. Muchas pacientes llegan con sus pastores y quieren rezar antes de la cirugía. Yo nunca voy a obligar a alguien en mi sala o mi equipo a rezar con una paciente, pero si una paciente quiere rezar antes de la cirugía, no me importa cuáles son sus creencias religiosas. Yo participo para ellas. Yo participo para lograr la meta. Este es su proceso, y yo solo soy una parte de él, así que respeto eso. Pero si alguien nunca ha recibido reiki y está dispuesta a hacerlo, mi sugerencia es intentar para que vea cómo se siente.
Una mujer llegó a mi consultorio la semana pasada. Creo que le diagnosticaron cáncer por primera vez hace 20 años. Y ahora tiene como 80, una mujer adorable. Y había tenido una sesión con Mary Lou, una de nuestras practicantes en la costa este que yo considero como un regalo de Dios. Una maestra de la sanación mediante energía. Y la paciente me dijo: “No tenía idea de que una sesión por teléfono podría transformar mi vida”. Pero después de la hora de sesión, dijo: “He obtenido más de esta hora de sesión que todo lo que aprendí de mi última experiencia con el cáncer”.
Ella me dijo: “Sentí que me sacaban un peso enorme de encima, que el peso de todo el mundo ya no estaba en mis hombros”, porque se pudo liberar de muchas cosas a las que se mantenía aferrada. Sanar es el proceso de dejar atrás las cosas que no te sirven porque... es como alguien que toma veneno y espera que se muera otra persona. Si continúas aferrándote a cosas que no honran a tu persona y que son negativas, solo lograrás hacerte daño a ti misma. Tiene que salir de tus manos y pasar a manos de Dios.
Jamie DePolo: Si alguien quiere experimentar el reiki, ¿cómo puede encontrar un profesional experimentado y —tengo más preguntas— cuánto cuesta? ¿Cómo se empieza el proceso?
Dra. Beth Baughman DuPree: Algunos podrían no creerlo, pero hay profesionales de reiki en todas partes, y yo siempre digo que las recomendaciones directas son la mejor manera de encontrarlos. Pregúntale a alguien. Pregúntale a tus amigos: “¿Alguno de ustedes ha escuchado del reiki, y si lo conocen, saben de alguien que sea bueno administrándolo?”
Obviamente, el Dr. Google ayuda mucho. Puedes buscar profesionales en Internet y Google. Sé que los profesionales en Filadelfia que tenemos en la Healing Consciousness Foundation son profesionales que hemos aprobado personalmente. Sé que están asegurados. Sé que han pasado por una revisión de antecedentes. Se ha hecho todo ese trabajo, así que los profesionales que estén en cualquier sitio web en el que yo participe han sido aprobados y son excelentes.
También sé que a medida que conozco a más y más mujeres y hombres en este proceso del cáncer, me presentan a otros profesionales, y es así como creamos nuestra oferta de los maravillosos sanadores con los que trabajamos. Pero todavía creo que las recomendaciones directas son un sistema muy bueno. Revisar las referencias y revisar en Internet, muchas veces puedas hacer una búsqueda rápida en Internet solo para ver cómo es alguien, pero siempre se puede llamar a alguien para hablar. Y depende de la conexión energética con este profesional, cómo se siente. Y, ya sabes, el reiki... He trabajado con profesionales que cobran $60 la otra, y otros cobran $160 la hora. Todo depende de quiénes son, dónde están, por cuánto tiempo han trabajado. El dinero en realidad es el intercambio energético que paga por el don de esa persona, que está haciendo de conducto de la energía universal.
Jamie DePolo: Existe algún tipo de... Sé que eres una profesional de nivel maestro. ¿Hay algún tipo de certificación o algo que quienes necesitan un profesional deberían buscar?
Dra. Beth Baughman DuPree: Existen tres niveles. Nivel uno, nivel dos y nivel tres. Y el nivel tres es el que se considera el nivel de la maestría. Pero también tenemos un nivel de instructor maestro, que “va más allá del nivel... y yo no tenía la disponibilidad para enseñar. Lo hice como una médica que vivía su propio proceso de sanación, de aprender lo que necesitaba hacer para curarme a mí misma y a los demás.
Y desde una perspectiva práctica, incluso alguien que solo está en nivel uno puede realizar reiki, y quien lo recibe puede obtener resultados maravillosos. Por lo general trabajo con personas que han llegado al nivel maestro, porque significa que han dedicado el tiempo y la energía necesarios para dominar el proceso, pero eso no significa que alguien en el nivel uno no puede ser bueno. Cada persona vive su proceso.
Una de mis mejores amigas, Wendy, fue una de las integrantes de la junta directiva de nuestra fundación. No es médica. No es enfermera. Es una persona común y corriente que aprendió reiki. Y, cuando la llevamos a nuestros retiros de sanación para pacientes, no hay persona que tenga una sesión con ella que no diga: “Oh, vaya. Esta es la mejor hora que he tenido en mi vida”. Y ella no tuvo que educarse por años y años. Hizo el nivel uno, nivel dos, nivel tres, y creo que la razón por la que es tan efectiva para el reiki es porque le nace del corazón.
Lo mismo que Mary Lou hace en sus sesiones, y Jodi, y Christie, y muchos de nuestros profesionales. Es algo que... No es que hayan ido a la universidad y recibieron su grado de profesionales del reiki. Empezaron a practicarlo porque, de alguna forma, se vieron beneficiadas por él y querían tener el poder de devolverle este regalo al mundo.
Muchos terapeutas de masajes también practican reiki. Así que esta es otra manera de buscar, porque una vez que se entra en el mundo de las modalidades de sanación, se puede agregar otros tipos de técnicas. Porque no todas las personas van por exactamente el mismo proceso. Tenemos que aparecer en el paso en el que estén nuestros pacientes.
Jamie DePolo: Ahora, ¿el seguro cubre el reiki?
Dra. Beth Baughman DuPree: Todavía no. Me gustaría que lo hicieran. Sería maravilloso que lo hicieran. El seguro cubre masajes, y a veces hay terapeutas de masajes que también hacen reiki, y eso es algo. Si tu seguro cubre masajes, también podrías averiguar porque, como el estudio demuestra, los masajes acompañados de reiki son mejores que solo los masajes.
Jamie DePolo: Para ir redondeando la idea, si alguien tiene interés en recibir reiki, ¿qué son las dos, tres o cuatro cosas más importantes que le gustaría que supiera antes de la sesión?
Dra. Beth Baughman DuPree: Bueno, para las personas a las que no les agrada la terapia que involucra contacto, pueden tener una sesión de reiki sin ningún tipo de contacto físico. Si ya van a tener la sesión con este profesional, esto sería algo que definitivamente le diría, porque no está mal colocar tus manos en alguien cuando haces reiki. Sin embargo, en la práctica tradicional, que es como me entrenaron, tus manos están separadas de la persona. Igual se llega a sentir la energía. Se siente el calor, la calidez que emiten las manos, pero, si hay reparos, es necesario comunicarlos de inmediato.
Lo siguiente es determinar la intención de la sesión. ¿Cuál es la intención? ¿Es solo para relajarse en general? Es por motivos emocionales, espirituales... ¿Es para la sanación física de una afección médica?
Nuevamente, es necesario tener disposición para recibir, porque la energía universal, si viene a través de un profesional, pero tú no bajas la guardia y mantienes tus muros, si no tienes disposición para recibir, va a ser muy difícil atravesar esas paredes.
Y para mí ultimadamente se trata de creer en que nuestros cuerpos sí tienen la capacidad innata de sanar. La forma como se los describo a mis pacientes es, como cirujana, cuando hago una incisión y extirpo un cáncer, tengo que juntar los bordes de la incisión en varias capas. La grasa, el tejido subcutáneo, la piel. Yo junto esas capas, pero no necesito instalar un programa en el cerebro de mi paciente que le diga: “Colágeno, vasos sanguíneos, nervios, fibroblastos. Vengan y entren en esta incisión. Vengan y entren este día, y este otro, y este otro”, porque nuestros cuerpos ya saben cómo sanar. Y cuando piensas en el proceso quirúrgico, nosotros como cirujanos no le decimos al cuerpo cómo sanar. Lo que hacemos es juntar los bordes, y nuestro cuerpo sabe sanarse y cómo aplicar el colágeno. Sabe cómo volver a unir esos bordes.
Así que cuando se piensa en sanación, sin importar qué problema aqueja a la persona que recibe reiki, nuestro cuerpo ya sabe sanar, pero a veces tenemos que mantenernos abiertos para dejar que funcione de nuevo. Y cuando permitimos que ese proceso trabaje al unisono con la cirugía, la quimioterapia y la radioterapia, es un proceso muy, muy poderoso, porque básicamente usamos todos los aspectos que nos sirven para el proceso de sanación. Y liberarnos de ese miedo y salir de la tormenta de cortisol le permite a nuestro sistema inmunitario avanzar en el camino hacia la sanación.
Jamie DePolo: Dra. DuPree, muchísimas gracias. Agradezco mucho la información que ha compartido.
Dra. Beth Baughman DuPree: Bueno, gracias por la oportunidad. Me encantó.
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